LA VISIÓN ECLESIAL MATERNAL DE OSCAR ROMERO
09.05.2015 11:02
La conmemoración en Venezuela del Día de la Madre, (10.05.2015) en el mes de la
beatificación de Oscar Romero, resulta una oportunidad para valorar el significado de la
dimensión femenina en la fe y en las Iglesias. Para el teólogo de la liberación Juan José
Tamayo “En el imaginario patriarcal religioso, influido por los clérigos, imanes, rabinos,
lamas, gurús, pastores y maestros espirituales, … Sólo los varones pueden ser sacerdotes en
la Iglesia Católica, imanes en el islam y rabinos en el judaísmo ortodoxo, sin que haya texto
sagrado alguno que excluya a las mujeres” (J.J. Tamayo. Reflexiones sobre las mujeres en las
religiones y la Teología Feminista. San Salvador. 28.06.2013)
La monja médica y teóloga Teresa Forcades i Vila diferencia: Una mujer que defienda la
sumisión de las esposas a sus maridos, o de sus maridos a sus esposas, tiene una perspectiva
femenina, pero no feminista. La teología feminista, como teología crítica o de la liberación,
“Presupone que las mujeres y los varones hemos sido creados para establecer entre nosotros
relaciones libres y recíprocas, sin sumisión ni dominio por parte de nadie” (T. Forcades. La
Teología Feminista en la Historia. Ed Fragmenta.2011).
El teólogo Hans Küng, creador de la Fundación Ética Mundial, luego de un análisis histórico
del papel de la mujer en la Iglesia, considera que “La iglesia del futuro no debería aparecer
más como bastión de la reacción antidemocrática, sino como una comunidad de “libertad,
igualdad y hermandad”, como quedó esbozado al final del paradigma de la Iglesia primitiva”
(Küng H. La mujer en el cristianismo. Editor. Trotta. Madrid 2002)
Por su parte, Leonardo Boff, valorando la dimensión humana y simbólica de María, Madre de
Jesús, afirma: “Las letanías a la Virgen encierran ciertas cualidades atribuidas a María que
nuestra cultura suele adjudicar a uno solo los dos sexos. De esta forma María es la madre
purísima, la madre amable…cualidades que son eminentemente (pero no de forma exclusiva)
propias de lo femenino, mientras que al mismo tiempo se celebra a la virgen poderosa, al
espejo de la justicia, atribuciones que son más bien (aunque no exclusivamente) masculinas”.
(LBoff. El Rostro Materno de Dios. Ed Paulinas. Madrid.1979).
El obispo mártir Oscar Romero, desde su visión eclesial invoca el compromiso de María:
“Que la Reina de la Paz, …Madre del Cuerpo original de Cristo y por eso mismo Madre del
Cuerpo de Cristo que se prolonga en la historia, cuide con protección poderosa de Madre a
nuestra Iglesia y a nuestra Patria. Bajo su palma de paz encarne aquí, en el pueblo
salvadoreño al Reino de Dios que Cristo sigue predicando mediante su Iglesia. Un Reino que
“no usurpa vuestras prerrogativas, sino que salva todo lo humano de su fatal caducidad, lo
transfigura, lo llena de esperanza de verdad y de belleza”. (Mensaje del Concilio a los
Gobernantes, n 4).” (Segunda Carta Pastoral. Oscar A. Romero. 6.07.1977).
Así, a las madres vivas, a las que perviven en los corazones y a quienes hacen sus veces, las
comunidades e Iglesias desde su compromiso por el Reino, agradecen: Feliz Día de la Madre.