LA ONU Y EL GRITO DE LA MADRE TIERRA

27.09.2014 13:33
 
La Cumbre del Clima 2014, iniciada el martes 23.09.2014 en la sede de la ONU en Nueva 
 
York, resultó un escenario de la mayor importancia humana, para tratar un problema ético 
 
mundial, donde se hicieron sentir las voces de las comunidades populares del mundo. 
 
El Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon, afirmó: “Necesitamos una visión clara, 
 
basado en acciones nacionales y multinacionales, para mantener el aumento de la temperatura 
 
global por debajo de los dos grados centígrados".
 
La Cumbre del Clima fue precedida por la primera Conferencia Mundial de los Pueblos 
 
Indígenas lunes 22.09.2014, donde el presidente de Bolivia Evo Morales, afirmó que las 
 
comunidades originarias deben ser protagonistas de los procesos de cambio, para dejar atrás 
 
un modelo económico que afecta la vida y la naturaleza. 
 
En esta misma dirección, En la Cumbre del Clima, el presidente venezolano Nicolás Maduro 
 
afirmó “El 20% de los países más ricos del capitalismo consumen el 84% de la energía 
 
del mundo, contaminando el planeta y destruyendo su equilibrio...No podemos seguir bajo 
 
el amparo de un modelo de desarrollo que vulnera drásticamente las condiciones de vida 
 
humana y ponen en peligro la existencia de las futuras generaciones“.
 
Afirmación que coincide con las señales de alerta ofrecidas desde diferentes perspectivas: 
 
San Francisco de Asís en su sensibilidad frente el hermano sol, la hermana luna, la hermana 
 
madre tierra; las comunidades originarias con su respeto a la Pacha Mama y su impulso hacia 
 
una sociedad del buen vivir. Las comunidades científicas desde el Club de Roma, que desde 
 
los años 1970 alertaron sobre los límites del crecimiento. Y recientemente, los movimientos 
 
sociales que afirman frente a la ONU la necesidad de cambiar el sistema irresponsable. 
 
En la declaración del Día internacional de la Madre Tierra el 22 de abril de 2009, con la 
 
presidencia en la Asamblea General del Padre Miguel d’Escoto, recientemente reivindicado 
 
por el Papa Francisco, Leonardo Boff afirmó: “¿Cómo garantizar la sostenibilidad de 
 
la Tierra ya que es la premisa para resolver las demás crisis: la social, la alimentaria, la 
 
energética y la climática? ... Dado el agravamiento de la situación ambiental de la Tierra, 
 
especialmente bajo el calentamiento global, tenemos que actuar juntos y rápido... La solución 
 
para la Tierra no nos va a caer del cielo, sino que será el resultado de una coalición de fuerzas 
 
en torno a una conciencia ecológica integral, unos valores éticos, unos fines humanísticos y 
 
un nuevo sentido de ser. Sólo así honraremos nuestro Hogar Común, la Tierra, nuestra grande 
 
y generosa Madre”. Así, desde 2010, Boff y d’Escoto, llaman a la reinvención de la ONU. 
 
Reflexión que anima a atender el grito de los pobres y el grito de la Madre Tierra.